En Murcia Un experto apuesta por el deporte para disminuir la violencia escolar

Un experto apuesta por el deporte para disminuir la violencia escolar

El director del Observatorio Internacional de Violencia en la Escuela, Eric Debarbieux, dijo ayer que “con infraestructuras adaptadas a los barrios, como por ejemplo las deportivas, se podría contribuir a disminuir la violencia escolar”.

Debarbieux, que pronunció una conferencia en las Jornadas Europeas sobre Convivencia Escolar que se celebran en Murcia, explicó que desde el Observatorio Internacional se han realizado más de 1.500 estudios en Estados Unidos sobre la violencia en las aulas.

En su opinión, una condición indispensable para que produzca esta reducción es que se asocien estas infraestructuras con los ciudadanos, de manera que sean ellos mismos los que las gestionen, y por tanto se impliquen con el problema.

Apuntó que a lo largo de sus diez años al frente del Observatorio su lema ha sido “ayuda a la comunidad y la comunidad te ayudará”, y opinó que una de las soluciones que podrían terminar con la violencia es la mejora de la comunicación entre profesores, padres, alumnos, y la sociedad en general.

A preguntas de los periodistas, explicó que no existe una única causa que se pueda atribuir a este fenómeno social, sino que existen un conjunto de factores de riesgo que lo generan, y explicó que estos factores aumentan si produce una situación de riesgo de exclusión social, si no hay estabilidad en los equipos docentes o un estilo pedagógico cooperativo.

Por su parte, Fuensanta Cerezo, profesora de psicología de educación especial de la Universidad de Murcia y ponente de las jornadas, también apuntó a la comunicación entre todos los agentes implicados como la vía principal para acabar con la violencia escolar.
“Hay que ser consciente de que este problema existe, y de que hay ayudar tanto al agresor como a las víctimas, ya que en ocasiones pueden desarrollar patologías que pueden dificultarles su forma de afrontar la vida”, añadió.

Asimismo instó a los educadores y a las familias a que “presten atención a los menores, a su comportamiento, y a su forma de relacionarse con los demás para detectar este problema lo antes posible”.

¿Por que las instituciones no se convencen de que ampliando las plantillas de los centros formativos de primaria y E.S.O. con Educadores sociales, animadores e integradores facilmente se consiguiese una reducción considerable de la violencia escolar?
¿Será demasiado tarde cuando se les ocurra?.

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