Teoria ASC e IS LA ANIMACIÓN SOCIOCULTURAL EN DISTINTOS CONTEXTOS INSTITUCIONALES (II)

LAS CASAS DE JUVENTUD

Suelen depender de una Concejalía específica destinada a prestar servicios a la población de entre 14 y 30 años.

Los Planes Integrales de Juventud recogieron las directrices de la Comisión Interministerial para la Juventud y la Infancia, las aportaciones de las Comunidades Autónomas, la FEMP y el Consejo de Juventud, elaborando el Plan de Juventud 94-97 estructurado en cinco áreas: Autonomía personal, Solidaridad e igualdad de oportunidades, Salud y prevención, Calidad de vida y Participación.

Estas cinco áreas se concretan en medidas y actuaciones que se ofrecen a la población juvenil desde las Casas de Juventud. Éstas tienen una estructura piramidal en la que los cargos políticos ocupan la cúspide, casi paralela la Junta Directiva o Rectora, de la que dependen los animadores socioculturales y, por último, el personal administrativo, de mantenimiento, monitores, informadores, etc. La optimización de los recursos humanos se logra cuando se crea un equipo en el que todos están implicados y que se proyecta hacia los usuarios.

Los programas que se desarrollan desde las Casas de Juventud son:

§ Asociacionismo y participación: apoyo, formación, asesoramiento, resolución de conflictos…
§ Cultura: apuesta por los jóvenes creadores, información y difusión artística y cultural...
§ Empleo: formación, bolsas de empleo, convenios con empresas, escuelas taller...
§ Formación: escuelas de animación, formación de tiempo libre, actividades intergeneracionales
§ Información: servicio de información, fondo documental, asesorías, bibliotecas...
§ Infraestructuras: espacios para reuniones, hotel de asociaciones,...
§ Ocio y Tiempo Libre: viajes, turismo juvenil, actividades de fin de semana, ludotecas, ferias...
§ Promoción de la salud: prevención de toxicomanías, higiene, salud mental, deporte...
§ Vivienda: cooperativas, alquileres, cesión de terrenos.

Las actividades no empiezan y acaban en las Casas de Juventud, sino que deben llegar a los lugares frecuentados por la población juvenil. Es preciso contar con los jóvenes para la puesta en marcha de los programas, pues deben ser, además de destinatarios, artífices con poder de decisión.