En este punto debemos destacar cuáles son los principios que deben compartir los trabajos socioeducativos y la animación cultural comunitaria; si los definimos epigráficamente, el esquema nos aportaría el siguiente resultado:
– El análisis constante de la realidad, en palabras de Cembranos et al., elconocimiento de la realidad para transformarla, para dar alternativa, paradefinir hacia dónde ir. Esta acción debe realizarse mediante formas deinvestigación inteligible para el colectivo. El técnico debe dar una interpre-tación profesional a la percepción social de la comunidad, entrelazándolacon su propio diagnóstico, analizando críticamente lo que la propia comu-nidad ha creado, pero también de lo que carece.
– La participación activa, pero OLVÍDENSE de la participación en actividades,en exposiciones, asistencia a conciertos, solicitud de ayudas para las redesasociativas o la participación en talleres didácticos. La participación activadebe fomentarse desde todos los procesos de la intervención cultural. Ypara ello, la planificación debe centrarse básicamente en la motivaciónhacia la participación, el ciudadano debe querer participar en la formaciónpara llevar a cabo esta participación, ha de saber participar y por último,las estructuras deben estar preparadas para esta participación; el trabajode diseño, de ejecución o de evaluación no se hace desde los despachos olas salas de juntas, los proyectos han de nacer de la propia calle, de laspropias tiendas, o de las puertas de los colegios.
– La decisión de su propio destino por parte de la comunidad beneficiaria, elderecho de autodeterminación. Y no sólo esto, la comunidad debe marcarel ritmo de desarrollo, éste no debe ser impuesto de forma artificial, debeexistir una predisposición a la capacidad y la voluntad de los propios indi-viduos.– Los sistemas comunicativos deben plantearse de forma constante y bidi-reccional; descartamos, pues, las estructuras jerárquicas de toma de deci-siones y control.
– Promoción del asociacionismo, favoreciendo la creación de gruposformales e informales, fortaleciendo los existentes. Hemos de fomentar laemancipación de la red asociativa frente a la lacra del seguidismo políticoy la tutela de estos movimientos por parte de los estamentos gubernamentales.
– La interconexión, el trabajo en red como herramienta básica de servicio alos ciudadanos y colectivos beneficiarios. Una metodología de coordinacióne interconexión de iniciativas.
Con el trabajo constante de estas ideologías, la buena gestión de proyectos decarácter sociocultural está más que garantizada, el diseño de las iniciativasmediante el trabajo permante y el seguimiento de los cambios en la realidad socialharán que exista un verdadero beneficio social, rendimiento neto en la comunidadde destino, que es el objetivo fundamental del gestor – técnico.
Decálogo para un grupo construir un grupo que dialoga
Hace 2 semanas
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