Continuamos buscando el poder ofreceros contenidos de calidad para una formación continua desde el Blog de la animación socciocultural e Integración social.
En este mes nos centramos en las Tecnicas de Mediación o de Resolución de conflictos.
Para ello hemos ofrecido y continuaremos a lo largo del mes ofreciendo varias dinámicas grupales que podeis usar como herramienta, pero creemos que tambien debemos formarnos teoricamente sobre el asunto. En nuestras labores de TASOC y TISOC muchas veces debemos ejercer como mediadores.
Para ello, que mejor que comenzar aprendiendo
Diferencia entre Problema y Conflicto.
La diferencia entre problema y conflicto es muy importante para entender el sentido de la mediación y su necesidad.
El problema es un hecho que nos puede ocurrir todos los días a nivel personal, con alguien o con algo del mundo que nos rodea; puede ser con el coche que se nos ha llevado la grúa y esto nos impide llegar a tiempo al trabajo, o con las cuotas de la hipoteca, que no podemos hacer frente, y tenemos que buscar la mejor solución con el banco, o con un compañero de trabajo que nos pasa su trabajo sin resolver…
El problema es una dificultad para seguir la marcha diaria en nuestra vida y hace que tengamos que buscar alguna solución para ello. A la vez nos aporta la posibilidad de poner en marcha nuestra creatividad y nuestros recursos personales, para salir de la mejor manera posible del mismo.
Einstein dice: “Un problema irresoluble, sin duda, es un problema mal planteado”
El problema pasa a ser un conflicto cuando, además de no darle una solución satisfactoria personal, nos hace sentirnos mal con nosotros mismos o con otros. Esto significa que entran en juego un sistema de creencias y emociones, que pueden dificultar la resolución del conflicto. Las creencias tienen que ver con la visión que tenemos de nosotros mismos, de los otros y del mundo. Esto reactiva las emociones más primarias que se derivan de esta visión, como pueden ser la rabia, el miedo, la culpa, la desvalorización etc., bien sea hacia nosotros mismos o hacia los otros.
Por lo tanto en un conflicto se ponen en juego toda una serie de creencias, lealtades invisibles, valores, emociones y sentimientos que van a influir en la forma en que nos enfrentemos al conflicto, así como en la búsqueda de la solución.
A resolver problemas y conflictos se aprende en la familia. Tomamos el modelo de nuestro entorno familiar y social más cercano y sobre todo de nuestros padres. Pues el niño desde que nace mira, observa, aprende y repite.
Si los niños ven en su casa que los problemas no se hablan, no hay escucha, no se tienen en cuenta las propuestas de todas las partes, se tapan o no se permite expresar las emociones que produce una situación y se toman decisiones sin contar con las necesidades de sus miembros y; además cada uno se queda sin poder elaborar lo que les ha producido emocionalmente el conflicto, descubren que el más fuerte gana y quien tiene el poder tiene la decisión, esto lo van a aplicar luego a lo largo de su vida en sus futuras relaciones de amistad, familiares, con hijos, de pareja, trabajo, etc.
Si por el contrario los padres hablan de los problemas en el seno de la familia y ven las dificultades reales y aportan posibles soluciones, valorando y estudiando cada una de ellas y se decide por la mejor solución para todos, o la menos perjudicial, los hijos aprenden que hablando, escuchando, dialogando, proponiendo, expresando los sentimientos, etc, las personas pueden llegar a entenderse, aún teniendo ideas, sentimientos o necesidades diferentes y con ello aprenden que de esta forma se pueden resolver problemas pequeños y menos pequeños.
La Mediación, que en sus inicios era informal, aparece como formal y toma auge alrededor de los años 1990 en España, debido a los serios problemas de convivencia y de violencia entre iguales, que estaban surgiendo en el campo escolar, de pareja, familiar, profesional, etc. Pues lentamente se habían ido produciendo cambios culturales, sociales etc., y, con ello nuevos problemas de relación, para los cuales no teníamos modelos, ni respuestas que nos sirvieran. Pues ante nuevos conflictos hay que buscar nuevas soluciones y lo conocido aquí no se podía aplicar, no servía.
Exposición relizada por Cecilia Martí.
Especialista universitario en 0rientación, Terapia y Asesoramiento familiar. Máster en Psicoterapia Humanista Integrativa. Profesora del Instituto Galene. Monitor en educación sexual. Mediadora Familiar. Directora del Instituto Cecilia Martí de Terapia, Orientación Familiar, Desarrollo y Formación personal. Elche.
Decálogo para un grupo construir un grupo que dialoga
Hace 2 semanas
1 comentarios:
LOS PROBLEMAS SON EL GENERO Y LOS CONFLCITOS SON LA ESPECIE; LOS PROBLEMAS TIENEN QUE VER CON LAS COSAS O CON AQUELLO QUE AFECTA A UNA PERSONA UNILATERALMENTE Por ejemplo: el carro que se averio o el no tener dinero para pagar el arriendo. En el conflcito siempre interviene dos o mäs personas. el conflcito siempre es con alguien. Por ejemplo, el no tener dinero para pagar el arriendo que es un problema, NOS lleva al conflcito con el arrendador que espera que el paguen el canon de arrendamiento.
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